Mediante el proceso de mejora descrito en uno de nuestros artículos anteriores, el metano contenido en el biogás se separa de los demás gases de la mezcla. De este modo, el biometano obtenido puede utilizarse, comercializarse y transportarse -en forma gaseosa o líquida- para alimentar vehículos de motor como alternativa al gas natural de origen fósil. Veamos en detalle en qué se diferencian estos dos compuestos y qué ventajas aportan su producción y uso.
Diferencias entre biogás y biometano
El biogás es una mezcla de gases (principalmente metano, dióxido de carbono y nitrógeno) producida por la digestión anaeróbica de biomasa (residuos de la transformación agroforestal y agroindustrial, purines de ganado, residuos orgánicos municipales) por bacterias llamadas metanígenos. Los niveles de metano en el biogás varían entre el 45% y el 75% en volumen; una variación que afecta al contenido energético del propio biogás. En tanques circulares especialmente cubiertos, el biogás se convierte en una fuente de energía útil para la producción de electricidad y calor.
El biometano, por su parte, es el producto de la refinación y purificación del biogás mediante su mejora. Con un contenido de metano superior al 98%, el biogás puede sustituir totalmente al gas fósil, sirviendo como combustible para el transporte y el gas doméstico.
Como fuentes renovables, el biogás y el biometano suponen un importante beneficio para el medio ambiente, cuya producción y posterior utilización supondría una reducción de las emisiones de GEI (gases de efecto invernadero), así como la preservación de recursos energéticos no renovables.
Incentivos para los productores de biometano
El Decreto sobre biometano, publicado el 15 de septiembre de 2022 y disponible en el sitio web del IGE, es sólo una de las formas de incentivar la producción de energías renovables. El objetivo de este decreto es apoyar la producción de biometano alimentado a la red de gas natural y producido tanto por plantas de nueva construcción (alimentadas por matrices agrícolas y residuos orgánicos) como por plantas de producción de electricidad a partir de biogás agrícola en proceso de conversión (total o parcial). Las plantas de residuos agrícolas y orgánicos que cumplan las normas de aplicación del Decreto pueden participar en el procedimiento competitivo y acceder a ayudas de capital y a un incentivo de la cuenta de energía (tarifa de alimentación aplicada a la producción neta de biometano).
Biogás y biometano: ventajas
El biogás y el biometano se encuentran, por derecho propio, entre las fuentes de energía renovables programables, es decir, aquellas cuya disponibilidad para la producción se mantiene constante a lo largo del tiempo.
Ambos compuestos son flexibles y se utilizan tanto en la generación de electricidad y calor como en el sector del transporte.
Por último, la producción y el uso de biogás y biometano es un ejemplo virtuoso de economía circular, en el que los residuos (agrícolas y ganaderos) se transforman en un recurso, mejorando la sostenibilidad medioambiental, reduciendo los costes de descarbonización y apoyando la revitalización del sector agrícola.